Retratos

Retratos son Retratos, nada mãs que retratos, importando muy poco que sean pintados por Hans Hölbein o que tenean salidos de la câmera de Cartier Bresson.
És muy probáble que representen sus objetos retratados, proyetando referentes en la búsqueda de los significados. La humanidad no vivi sin la tirania de lo significado. Quien há vencido es la opinión y jamás la verdad.

Sin embargo, um retrato también pueda representar la mirada interior daquel que lo compone, le permitindo algunos gramas de singularización estética, mismo que esse sujeto y su mirada jamás escapen totalmente de la tutela de Zeitgeist que os han pervertido.

Mis retratos soportan el gusto de um café coado por la segunda y tercera vez – su originalidad quizás sea muy precária. Que vale mismo es el gozo y la incerteza en concebirlos. !Puro campo minado! Tudo se resolve em um tiro em el oscuro.

Mis retratos quizá sean antropofágicos. Cómo lo que me di respecto. Em mi imaginario pagano, Nicolau Romanov se enamora de Stalin y vice-versa. From A to Z. La vida es curta en exceso para que percase tiempo y espacio com preconcepto ideológico o com hemiplegia intelectual. Que interesa es la busqueda por la belleza jamás encontrada, mediante los efectos sopostamente estéticos. Qué triunfe el más hábile, mismo que su moral sea de ocasión.

Um retrato es un retrato, nada más que un retrato. Su significado, su aplauso, su apredeamiento y su proscripción pertenece al gusto y a la sensibilidad de quien lo contempla.

!Lavo mis manos!

!Sean bienvenidos a la Exposición!